La Ley de la Segunda Oportunidad es una medida normativa que permite a las personas físicas, trabajadores autónomos y pequeñas empresas reestructurar o cancelar sus deudas en situaciones de insolvencia económica.
Esta ley es un salvavidas para todos aquellos que a pesar de sus esfuerzos no pueden cumplir sus obligaciones con sus acreedores permitiéndoles exonerar sus deudas para poder comenzar de nuevo o bien contar con un plan de pago adecuado para poder salir adelante sin que la deuda siga incrementando.
Los autónomos son todas aquellas personas físicas que realizan una actividad profesional de forma habitual, personal, directa por cuenta propia y recibe una remuneración por ella.
Cada vez son más las personas que quieren ser su propio jefe, tanto que hasta finales del 2022 había más de 3.329.863 personas trabajando de manera autónoma en España. Sin embargo, ser autónomo representa grandes retos tanto profesionales como financieros. Estos mismos retos se agravan con las crisis económicas y de salud como las que hemos vivido en los últimos años.
Desafortunadamente son muchos los autónomos y pequeñas empresas que solicitaron créditos para que su empresa creciera o bien para tratar de mitigar el impacto de las crisis, pero que pese a sus esfuerzos no lo han logrado y que han caído en insolvencia.
Ley de la Segunda Oportunidad para Autónomos
Son muchos los autónomos que dudan en acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad porque piensan que al hacerlo perderán sus principales activos, cuando la realidad es que pueden mantenerlos, aunque se exoneren sus deudas.
En el 2022 entro en vigor la reforma de la Ley Concursal, también llamada Ley de Segunda Oportunidad y dentro de los cambios que se hicieron se encuentra la introducción de facilidades para que autónomos y pequeñas empresas se puedan acoger a esta ley.
Lo que muchos desconocen es la posibilidad de que puedan exonerar sus deudas parcial o totalmente sin la necesidad de cerrar su negocio y así poder continuar con su actividad después del proceso.
Mecanismo de la Ley Concursal para Autónomos
La Ley 16/2022 permite a los trabajadores autónomos realizar una reestructuración de sus deudas o cancelarlas a través de un procedimiento especial de microempresas, lo que hace posible la conservación de los activos principales que requiere el negocio para continuar con su operación. Entre estos activos podemos encontrar maquinaria, muebles, ordenadores, vehículos y herramientas necesarias para la continuidad de la actividad.
La Agencia Tributaria establece se pueden acoger a este procedimiento aquellas personas físicas o jurídicas que realicen una actividad empresarial o profesional, que hayan empleado a menos de 10 colaboradores y cuyo volumen de negocio anual sea inferior a 700.000 mil euros (estos datos deben de ser al cierre del ejercicio anterior a la presentación de la solicitud).
Además de los requisitos anteriores los autónomos deben cumplir con los demás requisitos establecidos legalmente como el ser deudores de buena fe y presentar la solicitud de Exoneración del Pasivo Insatisfecho (EPI) ante un juzgado mercantil y con el respaldo de un abogado y un procurador.
Exoneración de deudas con Hacienda y la Seguridad Social
Cabe destacar que, en caso de exoneración de deudas públicas, estas se encuentran limitadas a 20.000 euros en su totalidad. Solo pueden exonerarse deudas públicas con Seguridad Social y Hacienda, pero no con las demás administraciones, por ejemplo, con Ayuntamientos.
Además, la exoneración solo se aplica hasta 10.000 euros por cada uno de los organismos públicos y se exoneran por tramos, por ejemplo, para los primeros 5.000 euros de deuda se exoneran en su totalidad, pero a partir de estos se exonera el 50% hasta alcanzar el límite de los 10.000 euros.
Creditaria Estudio Legal
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Las ventajas de acogerte la Ley de Segunda Oportunidad bajo la guía de un experto son muchas entre las que se encuentran, la posibilidad de cancelar total o parcialmente tus deudas, negociar los plazos para que sean más amplios, reducir la presión financiera, proteger tu patrimonio personal y muchas más.
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“Por el taller es por donde debe financiarse una empresa industrial y no por el banco”. Henry Ford.